El objeto del concurso es estrechar lazos entre arte y jardinería mejorando el valor de los espacios verdes para el día a día de los ciudadanos. Utilizando la música como herramienta que estreche lazos entre el espacio y el usuario, los compositores, activan sus sentidos y viven la música en un espacio ajardinado. La música, como temática propuesta en el festival, requiere ir más allá del diseño de un simple jardín. Se trata de poder activar un sentido, como es el oído, que no suele tener especial trato en el ámbito de la jardinería.